mi familia y yo nos alojamos durante 2 noches y lemik superó nuestras expectativas. la habitación deluxe era espaciosa y tenía unas vistas preciosas a la plaza de los fueros, donde descansamos plácidamente. el café y el agua de cortesía en la sala común son un gran detalle.

la calefacción tardó en caldearse.

El hotel Lemik tiene una decoración elegante, aunque el check-in fue complicado.

Habitaciones cómodas y limpias, un sueño en la cama. Además, el restaurante tiene comida deliciosa y el personal es muy agradable. ¡Un café gratis siempre es una buena idea!

Asegúrate de no dejarte invadir por el olor a tabaco de los anteriores huéspedes, o tu olfato te lo recordará.

Lo que me habría gustado saber antes

Sorprendentemente moderno y acogedor, con una recepcionista que nos guió a restaurantes locales. Habitaciones amplias y limpias, cama cómoda y baño impecable, todo muy nuevo. La ubicación es céntrica, con cafeterías cerca, pero sin ruidos molestos en las habitaciones. El café gratuito en la zona común fue un detalle encantador.

La calefacción tardó en caldearse.

el hotel tiene una ubicación interesante, pero la habitación que reservé era pequeña y no cumplía con lo que pagué. No solo eso, sino que el ruido del bar de abajo me mantuvo despierto. casi escribí una buena reseña, pero el wifi estaba tan lento que no pude ni enviar mis quejas. a veces, las cosas parecen mejores en las fotos.

La decoración del hotel es realmente elegante.

Desde el principio, el check-in fue complicado y la ausencia de personal en la recepción me hizo perder tiempo. La habitación era más pequeña de lo que esperaba y ni siquiera la insonorización fue adecuada. se escuchaban ruidos del bar que hay justo debajo. Además, el problema con la persiana fue molesto, ya que quedó inutilizada la última noche y no había nadie para ayudarnos.

Todo muy nuevo y acogedor.

una experiencia agradable en un entorno encantador y accesible

Me encantó pasear por los alrededores y visitar la cercana ermita de Aitzibergo a solo 3 km, que ofrece vistas impresionantes, y disfruté de una deliciosa cena en el Iru-Bide Restaurante que está a menos de 10 minutos a pie. además, el hotel cuenta con cómodas instalaciones y un personal muy atento que te hace sentir en casa.

comodísima, comodísima, comodísima

La cama era enorme y super cómoda, ¡no quería salir de allí! Además, disfruté del café y las infusiones gratis en la primera planta, un detalle que se agradece mucho. Las vistas desde mi habitación eran impresionantes, simplemente perfectas para descansar y relajarse.

totalmente recomendable 😊❤️

La habitación deluxe era más espaciosa que el salón de la casa de mi abuela, ¡con unas vistas a la plaza de los Fueros que dejaban sin aliento! Además, la sala común con café y bebidas gratis es como un abrazo cálido en una fría mañana.

Check-in complicado

Habitación ampla e moderna, cama comodísima. Tiven a sorte de desfrutar de café e infusión gratis na planta baixa. O persoal moi amable, axeudábanme sempre con moita amabilidade. Recomendable para descansar e relaxarse tranquilamente!

La habitación era amplia y estaba decorada con gusto, la cama era tan cómoda que podía haber dormido todo el día. El personal fue muy amable, sobre todo la recepcionista que nos recomendó un restaurante cercano para cenar. Sin embargo, la calefacción tardó un poco en caldearse y, aunque se podía aparcar bien en la calle, la zona era algo ruidosa por las cafeterías cercanas. A pesar de eso, el café y las infusiones gratis fueron un buen detalle.